"SÓLO EL 10% A MI FAVOR: GOLIAT GANÓ A DAVID"

 

Cuando avistas un tesoro y sabes que es el deseado, te lanzas a por él aun sabiendo que la travesía será dura y el porcentaje de triunfo escaso; calculé que no más del 10 %... y aún así, emprendí el riesgo dejando atrás ese 90 que me avisaba.

Muchos peces inocentes a mi parecer permanecían en la orilla, pero caí en la trampa; eran los guardianes que aparentaban debilidad y me hicieron más fuerte en los comienzos. Fue sacar uno, sólo uno, y sus parientes, en bandada, formaron batallón contra la intrusa que era yo. El castillo amurallado tembló con sacudidas como un terremoto de 7 en escala Ritcher. Eran demasiados contra mí. Algunos cayeron vencidos, otros me tiraron. El ejército era fuerte y yo a solas intentaba esquivarlo. Fui sorteando flechas y tiros escondidos; mi escudo, los suyos que me apropiaba en su derrota de caídas desbaratados. Ante una presumible victoria en la que los creí en retirada, apareció el mando que se mantuvo estable durante la batalla; ahora, su cuerpo se iba acercando lentamente haciéndome creer que sólo era un simple aviso de que huyera; me engañó; su esqueleto no paraba de curvarse grado a grado y si él caía, caeríamos todos y el desastre, incalculable. Busqué defensa en partes peregrinas que deambulaban por allí con el fin de amurallar al gigante cuya caída sería exterminadora. Y ahí lo dejé, creyéndome, muy ilusa que, aun no habiendo llegado hacia el tesoro soñado, al menos, el enemigo quedó fuera de juego en su impotencia para llegar hacia mí. No pasaron muchos minutos y con el miedo aún en mi cuerpo, me asomé desde la orilla. Ya no estaba curvo ni degradado; firme y decidido venía a la lucha cuerpo a cuerpo a sabiendas de que la victoria sería suya. Avisé, al alto mando de la que se nos venía encima y pudimos, de momento, pararle los pies ante ese ataque inminente. No fui vencedora, no conseguí el baulito que años atrás elegí como escondite de bonitos recuerdos. Allá, sobre una roca fuerte lo puedo atisbar, sé que me espera y algún día nos eontraremos. 


NOTA: HISTORIA BASADA EN HECHOS REALES, CUENTA MI EXPEDICIÓN EN UN CUARTO TRASTERO Y LO QUE ACONTECIÓ EN ÉL DURANTE MI BÚSQUEDA DE UN COFRE VESTIDO DE NAÚFRAGO EN UN RINCÓN DE ACCESO IMPOSIBLE Y DE LAS BARRERAS QUE ME LO IMPIDIERON (MUCHAS CAJAS Y, SOBRE TODO, UN GRAN COLCHÓN Y SU BASE DE LÁMINAS DE MADERA QUE SALVAGUARDAN MI PRECIADO TESORO).

EL GRAN ERROR: INVADIR AGUAS INTERNACIONALES...

Comentarios

  1. Que espectacular relato. Debes volver a intentarlo para vencer está vez. Buscar en los trasteros es una verdadera aventura. 🥰🥰🥰

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