HISTORIAS DE AHORA: "TODO EN SU SITIO"
Mi manía persecutoria del orden siempre me ha acompañado al igual que la del perfeccionismo. Si algo se salía del tiesto, por mínimo e imperceptible que fuera para los demás, el ansia se me desataba y el desastre viajaba con él englobando el total. Es propio de ese TOC que, de alguna u otra manera, se nos manifiesta a casi todos los que lo padecemos. Buscar la perfección en su totalidad es un sinvivir para uno mismo y para quien esté cerca, Es difícil modificar esa conducta porque es una lucha directa con la ansiedad que surge ante tal situación. El secreto para controlarlo no es pretender que ese diez basado en ese orden se mantenga referido a lo material, a lo insulso de su matemática posición, ese ha sido mi gran error. La casa y las cosas son, obligatoriamente, las que se han de adaptar a mi y a mis circunstancias y lo aprendes cuando aparecen, poco a poco, las limitaciones físicas que van modificando y rebajando esos criterios tan absolutos con los que creía de obligad...