"VERSOS ARROPADOS: ODA A LA MANTITA"


Nadie te recuerda en el estío

el sofá duerme al aire

y sus dorsales vacíos;

tu cuerpo sólo pide frío

y te odian con pensarte

si apareces en armarios,

pues olvidada yaces

exiliadas en altillos.

Van pasando rencores, 

se acercan esos ratillos

si alguna corriente de aire

hace burlas a los membrillos.

Y echas mano a tu escalera,

y ahí aparece ella,

deseando salir a escena

aunque sólo con pocas letras

y se acomoda dónde sea.

Sólo cubrirá frases cortas,

en actos secundarios

y lo diga el calendario.

Ella se sabe importante,

estelar y acompañante.

Tapará cuerpos sencillos

o arrogantes:

siestas con telecinco,

sus compis y antena 3

y dormirán a pierna suelta,

con la entrada del Vallés.

Y de ahí a su cama, 

ya con el pijama,

le dirá hasta mañana,

a esa humilde mantita,

quedando esta arrugada,

arrinconada bajo un cojín

aplastada, esperando la tarde,

el café y la sobremesa,

que arrope vacíos,

sueños y promesas

de que algún otro cuerpo

se sume a su cubierta,

vengan ratos de amor,

y les sirva de tapadera,

que lo que pasa bajo ella,

debajo de ella se queda.

Que no existe más prudencia,

que lo que una mantita calla,

pues su destino es servir,

a órdenes de Mercurio,

capitán de marcadores de vestidos,

desnudos o cubridores 

al sol que más calienta 

o a los frescos que te esperan.

Y si la desesperación te acecha,

con ella llega la solución

liándotela a la cabeza.







Comentarios

  1. Simpatiquísimo poema. Magistral. Pronto será protagonista la mantita

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  2. 🤣 No te preocupes que volverá pronto a tus tardes. Hoy, el sol amaneció tristón... 😉😁

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  3. Ya la tengo acuartelada y a la orden de ataque!!!

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