VERSOS SIN PROPIEDAD:" DE TODOS O DE NINGUNO"



Tiempos impropios para un rey

que llamaron Juan sin Tierra,

magna la Carta  dejó

que sobrevive a siglos

y litigios.

Muchos papeles encorsetados,

jurados y despreciados

 por falsos que la aceptaron

y sobre ella vomitaron

cuando tocaron los derechos

de la diestra eterna.

Aplicaron deberes a costa

de hombres y mujeres,

invisibles y sin paredes.

Sin tierras, sin ser reyes, 

sus palabras no se asentaban

en oídos sordos que ignoraban

a gente desnuda, sin gramos

de tierra propia que llevarse a la boca.

Centurias han vivido en continentes viejos,

en los sobrevenidos de allende los mares

que sumaron más caciques en ambos lados.

La ciencia no tiene espacio

en este mundo de desahucio de la razón

donde aún la intención la supera

y es la sinrazón la que impera

sobre descubrimientos que curen

las cubiertas que matan y destruyen

por creerse dueños de vecinos lejanos

o a su lado.

No importan las escrituras,

ellos, los desalmados,

ignorantes de propiedades,

de partes y repartos

dejando calamidades.

Y volverán campos sin trigos,

los mares ahogados en calles

de ríos de sangre,

sin peces vivos ni pescados.

Macetas y jardines regadas de odio,

sin abonos de paz de hermanos.

Que la tierra no es plana,

es sólo un planeta que da vueltas,

los que ahora están arriba,

después caerán en esos giros

que mueven los que más pesan.

Hoy renacen los tiranos,

los que nos roban y matan

a varias manos.

Niegan evidencias, se les murió

la conciencia de que la vida no es esa.

Su fortuna no es sentir que respiramos

cada día que amanece.

No conocen la mañana, el sol

que nos alimenta y comienza

cada vez que despierta.

Ellos viven en un casino,

de noche, alevoso

 donde se apuestan el mundo,

la vida y siempre ganan las tragedias.

No conocen más comedias

que las de  risas cuando

mueren sonrisas

que ellos matan en sus antros

de humos y escarnios,

borrachos de ganar más vidas.

Ciegos de alcohol barato

ejecutan alegrías ajenos a los llantos.

Que el mundo no es de cuatro,

que las riquezas no compran

lo que no tiene precio.

Que la vida es un regalo

que sólo la misma vida

podrá arrebatarlo.

Que nadie más que ella

tiene papel en ese reparto

ni teatro.

Dejen libres corazones, 

los que laten y los cuerdos.

Que ya llegarán los tiempos

en que se gasten y se paren

y acabemos en cubierto 

en tierras coloniales.

Que si no en vida,

en la muerte somos iguales.





Comentarios

  1. No sé si es porque estamos en tiempo de carnavales que en vez de leerlo apetece cantarlo!!! Es que eres arte!!!

    ResponderEliminar
  2. Y tú una dulce armonía que acompaña!!!

    ResponderEliminar
  3. Magistral. Que difícil es hacer comprender a los dueños del mundo que lo que ellos creen suyo solo son privilegios. Y esta moda de negar lo evidente y demostrable está alimentando la imbecilidad de forma alarmante.

    ResponderEliminar
  4. Qué te voy a contar si todo es un sin sentido, se perdió la asignatura de los "Valores", que no de la moralidad que es relativa, si esque alguna vez aquella existió amiga!!

    ResponderEliminar
  5. Total y y yristrmente cierto, querida Inma!!!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario