POEMA DE UN ROSA AGRADECIDA: "SOLES Y LUNAS A SU CUIDADO"
La rosa, mi rosa, siempre tan blanca,
blanca siempre cuando no la manchan,
manchas de lágrimas, ahora secas,
el rocío las riega cuando es preciso.
Rocío que empapa dulce,
borra amargas.
Amargas de vientos húmedos,
húmedos de tierras extrañas.
La rosa, mi rosa, no es de montaña,
montaña árida, escalones sin barandas.
La rosa, mi rosa, prefiere tierras,
en la tierra de los mares
descubre abundancias y saberes
que preguntaba.
Las olas le cantan,
las mareas la acompañan.
Qué feliz vive la rosa, mi rosa
cuando la luna y el sol,
se postulan en cuidarla.
Cosa hermosa la rosa en unas rimas preciosas. Y tú, maravillosa en poema y en prosa. 🥰🥰🥰
ResponderEliminarLa rosa es el todo, todo lo bueno. Gracias, precioso comentario, querido Emilio.
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