"VERSOS DE UNA HISTORIA: ALFA Y OMEGA"

La historia comenzó 

con el primer escrito,

La prehistoria acabó

con el primer latido.

Edad Antigua, clásicas

medidas de la razón excluyeron

al corazón que andaba perdido.

Edad Media, a mitad del camino

llega un nuevo sentido sin razón

invadiendo el corazón

ante los fuertes castillos.

La Alta, la Baja llegan

y la Edad Moderna

tira por tierra aquellas

que ya no eran.

La Reconquista murió

y buscó desesperada

la Edad Renacentista

que tanto moría un día,

como resucitaba 

en otras vidas.

Ese renacer se quedó

en los caminos de los tiempos,

recuerdos 

y algunos olvidos.

Confusiones tales y enredos

llevaron a la pérdida del Imperio.

Barroco, recargado a veces,

demasiado simple otras,

un tiempo nuevo, clásico,

sin tormento 

en lejanías y silencios

apaciguó callando, 

que no mintiendo,

tiempos del ayer,

muy antiguos que condujeron

la pasión del  Romanticismo.

Momentos oscuros, duros, tristes

acaban con sus moradores 

si no estaban atentos.

Edades Contemporáneas,

extrañas, complicadas,

Guerras, paces, guerras,

más guerras, menos paces,

muchas trincheras:

hay que guarecerse de lo que venga,

que los peligros acechan,

siempre están cerca.

La lucha sigue, la paz es lenta.

Volver atrás, renacer de lo sublime

soñando aquel Imperio que fue,

es misión de altos vuelos,

de aquellos primeros que nacieron

libres, sin razones y sin miedo.

Hoy, no sé qué tiempos serán,

ignoro qué Edad nacerá

en los tiempos venideros,

 sobrevivirán con nombres nuevos,

la primera y la última del planeta:

alfas y omegas,

las verdaderas poetas que reescribieron

historias, momentos a contratiempo

y que ni el más fuerte de los vientos

pudo arrastrar esas hojas de papel

con tintas de las doradas

 lunas de miel.