"CUERPOS Y CAMBIOS DE TEMPORADAS"
Si hay algo que nos iguala en la vida es el momento del nacimiento, todos lo hacemos desnudos. Nos desprendemos de la placenta y nos quedamos con nosotros mismos, al menos, durante los minutos suficientes hasta que nos envuelven en mejores o peores paños según el pedigrí con el que nos apellidemos y la casa que nos espera. A partir de ahí, somos cuerpos, somos piel, somos mutantes en tamaño porque lo son nuestros huesos que van creciendo y nos cambian haciendo de nosotros seres únicos aun queriendo imitar a otros creyéndolos perfectos. ¿Y qué es la perfección?, ¿Quién es más alto/a o más bajo/a?, ¿Quién más gordo/a más delgado?, ¿Quién es más guapo/a? Es evidente que todo es relativo: si pesas cien kilos y a tu lado, a otro la balanza le marca ciento diez, el de la centena saldría ganando y así con todo lo aplicable a esas reglas marcadas, que no escritas, por la sociedad y tan cambiantes como el clima. La medicina da unas pautas de salud en estos casos que sí pueden servir como paráme...