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"CUENTOS ARRIMADOS A LA ABUELA: A DADA LE GUSTAN LOS VUELOS"

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Dada aún no gatea y le quedan algunos meses para andar, cada vez menos. Sus ansias por hacerlo se manifiestan en sus imparables movimientos de brazos y pies. Los agita constantemente demostrando que necesita conocer, por sí misma, todo lo que le rodea y lo que todavía le queda más lejos. Javi, su papá, la anima a conseguir esos sueños exploradores por las alturas elevándola desde su pista de despegue y que va, poco a poco, subiendo, con alguna que otra turbulencia, hacia lo más alto posible del techo de su casa que pone límites, de momento, a los pies de altura que la separarán del suelo. Dada no refleja ningún miedo en esa elevación, sabe que, con su papá, siempre está y estará protegida. Sus fuertes brazos la sostienen con tanta seguridad que ella no puede más que disfrutar esos momentos con risas y carcajadas por lo feliz que se siente.  Dada no sabe que existen los miedos y, si algún día aparecen, su papá estará ahí para presentárselos, conocerlos de frente y responderles que son f

“VUELA, MANUELA, VUELA”

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  Al igual que el cava y las uvas, el primer día del año nos trae las innumerables colecciones de muchas editoriales y de las que creo que solo se vende el primer volumen (vienen acompañadas de una oferta tentadora y servirán para saciarnos y no continuar con el siguiente): cursos de inglés con mágicos métodos cuyos resultados serán "milagrosos"; clases de pintura, de croché, maquetas para montar a cuentagotas…;a la par, llegan las rebajas; los febreros vienen, también, con lo suyo y marzo, abril…y de vuelta a la navidad. Demasiados dejà vu. La vida está tan escrita que resulta refrita. Desgraciadamente, los guiones solo se alteran por situaciones dramáticas. La pandemia nos obliga a incumplir los “presuntos preceptos” desde que arribó a nuestras vidas. El mundo se ha rebelado por los cambios o pérdidas de sus hábitos más que por los estragos ocasionados por el huracán pandémico. He visto a gente llorando por no poder acudir a cenas de nochebuena; pataleando por estar prohibi