"CUENTOS ARRIMADOS A LA ABUELA: DADA CONOCE A REALIDAD"
Era mediados de un primer otoño para Dada, su primer noviembre. El sol no brillaba, algunas nubes amenazaban con llantos tempranos. Una resaltaba más que sus acompañantes por ser más oscura y más grande; tenía una forma muy diferente a las demás, ovalada, con un marcado círculo central. A Dada le pareció que era un ojo por no dejar de mirarla. Se acercaba más y más a ella y a Nana, tanto que consiguió penetrar en su espacio. No era como las demás visitas anteriores, no llegó rodeado de magia, lo hizo, simplemente. Ellas estaban expectantes ante tal aparición, permanecieron en silencio. Él las observó con detalle, se limitaba a estudiarlas, y a escuchar sus voces calladas ante el asombro. No sabemos cuánto duró ese instante o esos muchos momentos. Él rompió la espera pronunciando la intención de su venida inesperada: SOY EL QUE TODO LO VE Y LO SABE, exclamó con voz potente y seca. Ellas no se asustaron, querían saber más y le preguntaron qué era lo que veía y lo que su sabidu...