"CALOR EN LA NOCHE"

En los hogares, el frío se dulcifica con abrazos, cuidados, arropando a los nuestros con lo mejor que tenemos y, sobre todo, con su beso de buenas noches. Sabemos que dormirán junto al calor del amor que les rodea y eso nos reconforta y tranquiliza. Cuando abran sus ojos, un desayuno les espera antes de enfrentarse a las temperaturas y a sus quehaceres de cada día.

De estos hogares, sabemos que tienen paredes, camas, baños, ropa limpia y alacenas donde guardan lo necesario para cada momento del día y de la noche si fuera necesario; por encima de todo eso, tienen lo más importante, un TECHO.

A los que tenemos la suerte de tener lo suficiente o, incluso, más, nos puede resultar impensable que exista otro mundo, cercano a nosotros, muy cercano, donde su techo sea el cielo (nuboso, lluvioso y oscuro); su cama, un banco; su ropero, un carro; su despensa, una bolsa con algo o nada. No lo vemos, porque estamos dormidos o no queremos despertarnos durante esas continuas noches interminables a las que les sigue el resto del día sin más ilusión que el amanecer que les restará ese frío que provoca el hambre y la soledad.

Afortunadamente, no todos los que tienen paredes y techo se mantienen con los ojos cerrados sin ver lo que pasa afuera y los miran de frente sin volver la cabeza para otro lado. Estas personas dan visibilidad, con su presencia, a todos aquellos invisibles para el resto que sigue durmiendo o ignorando que nos necesitan.

 Calor en la noche es el nombre de una asociación gaditana, sin ánimo de lucro, creada hace ya 20 años en nuestra ciudad. Su misión es acompañar durante la noche a todos aquellos que están totalmente desamparados, brindándoles unas mantas, algo caliente que tomar y unas palabras que mitiguen algo de su soledad.

 Por las mañanas, desde la sede de su asociación, los atienden repartiendo desayunos a todos los sin techo o a cualquiera que esté en situación precaria y no se pueda permitir hacerlo en su casa.

La constituye un grupo de voluntarios, con una impecable organización, cuya finalidad es que nadie, en la medida de sus posibilidades, se sienta en el absoluto abandono. También, están a su lado en situaciones de ingresos hospitalarios o consultas médicas dándoles su apoyo en esos momentos de mayor vulnerabilidad donde se les informan de sus derechos y de la dignidad que merecen todas las personas, sea cuál sea su estatus en la vida y en la sociedad.

Se esfuerzan por fomentar la concienciación social acudiendo a la base del futuro: los colegios, donde imparten charlas cuyo fin es que crezcan con valores solidarios y empáticos. No olvidemos que, todos los que ahora no tienen nada, alguna vez posiblemente, sí lo tuvieron pero fue la vida o sus errores los que se lo quitaron. A todos nos puede pasar: perder la familia, el trabajo, el amor, la amistad..., nadie está a salvo de los caprichos del destino. No nos creamos tan poderosos, porque no lo somos.

El mantenimiento con el que cuenta CALOR EN LA NOCHE es el que aportan sus socios mediante cuotas y, también, asignaciones de colectivos que donan  a esta causa. Durante el año, especialmente en navidad, son muchas las participaciones ciudadanas y empresariales que ayudan a sostener esta gran labor.

Imaginemos, pues, que todos los días del año son los navideños; nos necesitan cada noche y cada mañana. Ayudemos  a los que ayudan y asumen una tarea que nos compete a todos, porque todos somos seres humanos.