" EL ABURRIMIENTO: EL ORIGEN"

 

Hay un refrán que dice: cuando el diablo está aburrido, mata moscas con el rabo...; y, es verdad, la gente se aburre en general. Es tal el vacío que la ocupa que ha de buscarse la vida para rellenarlo. De ahí, de ese bulto que rebaja las ganas de distraerse, vienen muchos de los problemas que nos aquejan. Ese ocio mental lo dirigen, en la mayoría de los casos, a fijarse en el que está a su lado o más allá. Pierden su valiosa vida en este mundo en el ataque hacia los que consideran más débiles por su sensibilidad o, simplemente, porque los aburridos carecen de ella. No se ven a sí mismos, no quieren mirarse reflejados en ese espejo en el  que les avergonzaría  encontrar su realidad pobre, insulsa, hueca... y se encaminan hacia el foco de la maldad que crece en su interior para satisfacerse. Desde el origen de los tiempos, ese no saber qué hacer con su propia vida ha sido el motor que mueve el daño a terceros. Si el que le roba las tierras al vecino procurara seguir labrando las suyas para mayor prosperidad, no necesitaría poseer las ajenas. De ahí los primeros conflictos que pasan a mayores cuando estallan guerras con el fin de arrebatarles lo que es del otro y que no le resultará suficiente y continuará hasta adueñarse del resto mientras le dé la vida. No le importa lo que originariamente era suyo que, posiblemente, lo haya dejado morir por su falta de cuidados. Sólo pretende conseguir el todo porque vive en la nada y nada le basta.

La humanidad se nutre con la crítica destructiva; es un terreno inacabable en esa búsqueda  por encontrar a alguien o a muchos con los que los alimentarse. Los supuestos defectos  que observa en los demás son los que perviven en esa ceguera que le impide conocerse a sí mismo y limpiar su casa desordenada, olvidada por no estar nunca en ella y siempre en la de los demás.

¿Por qué existe el acoso, la violencia, el maltrato, la psicopatía, el daño gratuito, el ataque en vano, la humillación, la envidia..., en personas que presumen de ser "normales", sin aparente enfermedad mental, pero que emplean su tiempo, su vida en hacer el mal como pasatiempo a ese tiempo que no pasa para ellos cultivándose a sí mismos, cubriendo esas carencias a costa de los demás debido a su falta de inteligencia emocional y que sustituye esa maldad infinita hacia esa distracción constante para no sentirse ni verse como el único culpable de su propio aburrimiento vital?

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