" MI FAMILIA QUE SIGUE AQUÍ"

 

Hace un par de días, me reencontré con una parte de mi familia del ayer y descubrí que es atemporal. Fue lo que se llamaba familia política por no serlo de sangre pero sí de vínculos. Que te separen unos papeles no obliga a romper con ese pasado unido durante muchas décadas que dieron frutos sanos de árboles cuyas hojas son perennes y se mantienen en pie con raíces inquebrantables. Vivir con los que quisiste, quieres y te siguen queriendo es propio de almas sanas, sin prejuicios ni malos recuerdos. 

Eran los mismos de siempre, los que ya estaban desde mis quince años cuando los conocí y los que han nacido de entre nosotros con mucho amor y que dan lugar a  un grupo formado con la añoranza de los que se fueron para siempre y la alegría de los que vinieron para quedarse. Hemos tenido hijos, nietos y cambios de roles que, lejos de apartarnos, nos unen porque todo esos nuevos integrantes han venido con el amor bajo el brazo: suman y nunca restan.

Nunca me gustó la sentencia de "hasta que la muerte os separe", me resulta siniestra y apocalíptica. Lo que te separa es la evolución de cada uno de los que forman esa unión, el crecimiento hacia otro mundo personal en el que quieres seguir caminando en tu vida porque, como canta Sabina: dos no es igual a uno más uno. Cada persona es un ser único, individual y tiene todo el derecho a manifestar sus inquietudes sin miedos a empezar nuevos trayectos en solitario o en compañías. 

En mi caso, no me encontré a una rival que ocupara mi lugar, todo lo contrario; hallé a una gran amiga-hermana, otra madre para mi hija y la tercera abuela para mi nieta. Y, lo más importante, sabe hacer feliz a la persona que fue en mi vida y que sigue estando como padre, abuelo y amigo para siempre.

Soy una persona afortunada, tengo una gran familia del ayer, del hoy y del para siempre. Con todos ellos, el cariño y la amistad se mantienen en el presente y, sin duda, nada presagia un futuro diferente.

Ah, y nada que ver con los hoy llamados "cuñados"; para mí lo siguen siendo, pero de los buenos.

Comentarios

  1. Eres maravillosa. Es difícil encontrar actitud más civilizada tras una separación o divorcio. Dada tiene mucha suerte

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    1. Nadie es propiedad de nadie, somos seres libres e independientes y tenemos la obligación de buscar la felicidad.

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  2. Lo que importa es el cariño.
    ( Nicasia)

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