"DADME UNA PAUSA, BORBONES, QUE NO DOY ABASTO"

 

Según la iglesia muy católica y menos cristiana, siete son los pecados capitales que los humanos cometen si están alejados de su santo manto.

Estas culpas no son "pecado original"; no fue ella la inventora, sino que los establecieron desde el comportamiento habitual de sus compis de  pupitre y de palacio, los monarcas.

Desde sus conductas "ejemplares", quedaron  ideales para copiarlos. Una vez catalogados y testados, se fijaron por y para ambas partes (dicen que quién hace la ley, hace la trampa..., con las bulas papales, tenían el perdón terrenal y eterno asegurados, como debe ser.)

Dejemos aparte a los austrias por ser los tiempos donde imperaban la ignorancia y el emperador en medio mundo, ya nos queda muy lejos a nosotros (al imperio me refiero...).

Quedémonos con sus herederos de sangre adulterada donde sus adn fueron tan alterados entre ellos mismos que provocaron una nueva especie en el reino de los seres raros perdurando hasta hoy.

Tras la casa de Austria, llega la borbona, desde Francia, con el comienzo del siglo XVIII; siglo de las luces y la ilustración y  que dieron pie, varias décadas más tarde, a su famosa revolución. Los galos lo solucionaron a la tremenda y solo a un bisnieto, digno de su bisabuelo, cuya alteración sanguínea in extremis (borbónica y franquista) le provoca ilusiones, aún, por sentarse en ese trono. 

Felipe V, Luis I, Fernando VI, Carlos III, Carlos IV, Fernando VII, Isabel II, Alfonso XII y el + 1 al  que se sumaría, por supuesto, el Impresentable; al  retoño de este último, solo  mencionarlo institucionalmente,  ya veremos o no...).

La suma de todos ellos supera al número de los pecados esos, pero no importa, no se trata de adjudicar una a cada uno, ojalá, no, es mucho más fácil, solo sería cuestión de quitar ( si fuera posible) alguno que no les perteneciera porque parecen hechos a medida y, es que lo fueron: GULA, SOBERBIA, AVARICIA, ENVIDIA, PEREZA, LUJURIA e IRA.

Además de estas flaquezas reales, claro perogrullo, siempre nos quedarían muchas más que les pertenecerían por derecho ( y por revés). Y hablando de las causas reales, estas se prolongan también hacia sus familiares políticos incluyendo, por supuesto, a los cuñados. ¿Será todo efecto de la consanguinidad?

Pecados capitales, finiquitados, más allá de los Pirineos, decapitando. Estos pasaron la línea de la Razón que tanto pregonaban. Seamos nosotros, los españoles, con  un comportamiento más racional y pacífico, y echemos mano a las urnas, que el pueblo hable y que sea el que decida.