"HACER TU CAMA SÍ O SÍ"

 

No estoy hablando metafóricamente o sí..., ya veremos. El hecho de hacerla o no implica el caos o el desorden en uno mismo. Cada mañana, nos levantamos de ella. La hemos usado a nuestro gusto o con disgusto, depende de lo bonito que hayan sido nuestros sueños o que nos hayan visitado pesadillas en ellos o, lo que es peor, hayamos estado insomnes. En cualquier caso, la cama ha sido nuestro soporte esa noche o, en cualquier momento del día, sin dormir, pero despiertos al amor. Es quizás, la parte de la casa a la que más debemos, y le debemos respeto.

Hacerla, arreglarla, vestirla una vez ventilada, es un momento importante; no hacerla, es no buscar la armonía del orden debido para con ella y para ti mismo. Arreglarla solo si alguna visita acude, es no pensar en ti, solo aparentar quién no eres mostrando tu otra cara de paripé.

Si un día dejas de cuidarla y atenderla, ten por seguro, que le seguirán muchos más. La desidia y la desgana se irán apoderando de ti e invadirán el resto de tu casa y, lo que es peor, el resto de tu vida. Cuidar de tu casa es equivalente a cuidar de ti, a quererte, a vivir y a convivir con  la estética mínima para no entrar en el "¡qué más da , si solo lo voy a ver yo!"; esa es la peor respuesta que te puedes dar. Tú eres el más importante de tu casa (si vives solo/a) o de tu habitación (que también podría ser compartida: por hermanos o por tu pareja); no obstante, cada uno tiene su espacio y su obligación para con ese lecho. Inculcar a los hijos el deber de hacerlo, aprendiendo de sus padres, es quizás, la primera responsabilidad en su vida y debe cumplirla (a partir de los 6 o 7 años como máximo, ya es el momento, aun cuando no la haga perfectamente, lo importante es dar el primer paso para asumirlo).

Nunca, jamás, está justificada una cama deshecha. El decir "no me dio tiempo", tampoco. Son pobres excusas que dicen poco bueno de quién las pronuncia. La peor de todas es aquella que se argumenta con "si la voy a usar esta noche otra vez...", ufffffffff, qué feo: ¿dejas de hacer un almuerzo por haberlo hecho el día anterior?. Esto es igual. 

No perder de vista quehaceres diarios precisos mantiene el mínimo y básico equilibrio para no caerte en la dejadez progresiva del" todo me da igual" y, de ahí, a pasar de mucho más hasta que todo vaya a mucho peor. No te abandones, no la abandones a ella. Os necesitáis mutuamente. No lo olvides.



Comentarios

  1. NUNCA salir de casa sin hacer la cama.
    (Hermana mediana)

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    1. Qué feo está dejarla deshecha, qué dejadez...

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    2. Totalmente de acuerdo. Hacer la cama, después de ventilarla, dejarla estiradita y wapa es comenzar el día para que todo te vaya bien. Para mi, no hacerla o hacerla mal es sinónimo también de poco interés por todo. Les compraba a los niños sábanas y colchas de cuadros o rayas para facilitarles el trabajo y les animaba a disfrutar si la dejaban derechita y alisada. Hoy es batalla perdida. No se si por ser hombres o por ser hijos de alguna perfeccionista como yo. El caso es que siempre las he hecho con amor, con interés, ese es el truco. Como empiezo casi todo los proyectos de mi vida cotidiana. Si estudiaba, antes limpiaba la mesa, me aseaba, hacia mi cama y ya, como por arte de magia, todo me entraba mejor. Jajaja

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  2. Exacto, comenzar con el pie derecho!!!

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  3. He leído que el no hacer la cama es bueno para la salud ya que no se que hace pero es malo para los ácaros y entonces bueno para los humanos

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    1. Los ácaro mueren con la ventilación y la higiene. El resto de teorías, excusas...

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  4. Qué bien se está cuando tienes tu casa ordenada y a tu gusto.
    Permite mejorar tu estado de concentración y bienestar.

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  5. El que buena cama hace en buena cama se acuesta.Totalmente cierto.

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