"¡NO TE LA COMAS...!"
Pascal dijo: "La moral (entiéndase como la praxis de los valores éticos de cada persona) es la higiene del alma". En efecto, NADIE, en su sano juicio, sin alteraciones provocadas por algún trastorno mental o emocional, optaría por comer lo que viene siendo una caca, o más claramente y sin tapujos, una MIERDA. Los excrementos son comidos más a menudo de lo que nos pensamos. Sin darnos cuenta o, incluso, a veces, siendo conscientes de ello. ¿CUÁNDO?, siempre que ensuciemos esos valores, principios que no correspondan con nuestra ética, siempre que nos faltemos al respeto a nosotros mismos incumpliendo nuestros preceptos con actitudes contrarias a las que sentimos; es decir, aceptar lo contrario a lo que somos, a nuestros sentimientos y emociones. Ir en contra de nuestra propia voluntad por conseguir aquello que no merecen pero que tú crees que, a pesar de todo, hay que darlo.
Gran error, gran fracaso, nunca terminará bien lo que empieza mal. No puedes querer sin quererte a ti. No puedes amar sin amarte a ti. Ahí empieza la dignidad de la persona a tambalearse, en el momento en el que abandonas lo que eres por ser quién no eres. Porque la dignidad es ser coherente con tus principios, contigo mismo, seas cómo seas, pero eres tú. Si jamás te comerías esa MIERDA, no lo hagas pase lo que te pase. Sabes que estarás entrando en un mundo sucio en el que tu alma quedará manchada y gravemente. Esquívala desde tu conocimiento de que es lo que es, de que nunca vivirás lo que soñaste, porque comerlo nunca fue ni tu sueño ni el de nadie.
Perder nuestra dignidad es posible desde muchos ámbitos a lo largo de nuestra vida: el emocional (resignándote a quedarte con quién no debes), el laboral (ejecutando órdenes a sabiendas de que son inmorales, pero, que son las que te dan de comer...), las familiares ( si tus padres te educaran desde valores insanos), en la escuela (acatando normas injustas tanto para el alumnado como el profesorado), las amistades (aquellas que te manipulan y pretenden cambiarte para ser como ellos).
La prostitución es entendida como el comercio de nuestro cuerpo a cambio de dinero, pero ¿qué pasa cuándo se comercia con nuestros valores a cambio de abandonarnos a nuestra suerte?
En muchas ocasiones, no se podrá ejecutar el libre albedrío por no haber, en principio, otra opción y no nos quedará, de momento, más remedio que comerla o picar algo de ella. Pero, nunca olvidemos que somos conscientes de lo que estamos haciendo y, de la misma manera. hay que salir, escapar y huir para no volver jamás.
Enhorabuena, Moby!! Estar en paz con uno mismo nos brinda un alma dulce que sentimos y transmitimos!! Gracias mi siempre recordada Moby!!
ResponderEliminarMuchas gracias, queridísima Patri.
EliminarNunca lo habría pensado, e incluso te da cierta paz contigo mismo "nunca olvidemos que somos conscientes de lo que estamos haciendo y, de la misma manera. hay que salir, escapar y huir para no volver jamás." Me encuentro en ese punto.
ResponderEliminarhuir de lo que te va matando por dentro es lo más sano e inteligente.
EliminarYo me quiero y quiero
ResponderEliminarERES FELIZ, SIN DUDA.
EliminarAKUNA BATATA
ResponderEliminarExiste la felicidad? ....Completa ,no.
ResponderEliminarMi felicidad solo depende de una persona y esa persona soy yo .