"TIEMPOS EN PROPIEDAD"

 

Cuando te llega el momento de decir adiós a una vida anterior porque ya está agotada y necesitas cambiar de aires antiguos para oxigenarte y desprenderte de pesadas mochilas con media vida a cuesta, habitas en el limbo hasta tomar la ruta olvidada del deseo inicial, de todo lo que no llegó a nacer o que a penas sobrevivió a ese parto complicado.

Son muchos los momentos, etapas, vidas dentro de ti  con las que has de enfrentarte antes de cambiar a otra nueva, a esa que espera a que la llames por su nombre o no lo hará nunca.

Si dejas atrás tu vida laboral, también se quedan olvidados los calendario, los relojes que te marcaban días de 36 horas y que tú echabas 37 y media, las alarmas tediosas avisándote de comienzos o seguimientos de que el ayer no se terminó y has de continuar duplicando jornadas que siempre serán continuas sin ver el fondo del fin.

Si consigues adivinar qué hacer después del todo a la nada, habrás triunfado; saldrás de esa sala de espera, de ese limbo incoloro hacia tu color elegido libremente con el que pintar otros cuadros. 

Si tu edad es lo suficiente abultada, será más fácil. No has de ir a ningún banco, no necesitas hipotecar los años, meses, días u horas pendientes. Vas a adquirir, por fin, lo más preciado de tu patrimonio, la propiedad de tu tiempo, ser dueño de tus relojes sin números ni agujas. 

Lo más difícil del proceso es olvidar las planificaciones, todo aquello que eran deberes infundados y que, ahora, en el presente y tan cerca de perderlo, se transformará sin darte cuenta, en el ayer.

Comentarios

  1. Qué razón tienes!!
    Me dejas sin palabras!!
    Un abrazo, querida Mobi!!

    ResponderEliminar
  2. Moby: Sí, es verdad, cuesta olvidar el estrés docente pero terminas estresándote por otros motivos con más alegría. No me arrepiento aunque a veces lo eche de menos. Beso. Er More.

    ResponderEliminar
  3. Si ejerciste la docencia con pasión, ni te olvidas de tus clases ni de los que fueron tus alumnos, jamás. La seño Manoli

    ResponderEliminar
  4. Bendita profesión y pasado que gracias a eso, somos quienes somos. En nuevos tiempos, nuevos retos, hay muchos por vivir y superar...disfrutar sobre todo.
    Un beso enorme Moby

    ResponderEliminar

Publicar un comentario