"CÁDIZ ESTÁ DE LUTO"
De lo único que no podemos dudar al nacer es de que ya estamos en el mundo de la vida. Ese es el verdadero pan debajo del brazo. A partir de ahí, el tiempo es el que tiene el poder sobre nosotros; es caprichoso y hará con nosotros lo que se le antoje. No es cuestión de quién se merezca más o menos calendarios que arrancar cada uno de enero o cada principio de mes o de semana, no. Tenemos por delante un gran campo que labrar y del que existen posibilidades de buenas cosechas o de que estas den frutos que no florezcan más allá de unas pocas primaveras; ocasiones en que se nos pasan esas recogidas por no mirarlas aun estando ahí a nuestra vista y, cuando por fin nos decidimos, se han secado o nos quedan demasiado alto para alcanzarlo y faltan las fuerzas para llegar a esas ramas de donde tomarlas. Ese regalo que es la vida es un presente del que no se puede exigir futuros porque nadie lo tiene asegurado, nada está escrito, todo cambia en un segundo y los tiempos se paran en un eterno pasa...